Martín Belaunde se encontraría en
Bolivia desde junio del 2014
Prófugo empresario habría llegado a La
Paz cuando aún no había orden de captura internacional y dirigía sus negocios a
través de correos electrónicos. El canciller boliviano, David Choquehuanca,
asegura que su país no protegerá a un corrupto.
El
prófugo Martín Belaunde Lossio habría ingresado a Bolivia a fines de mayo o los
primeros días de junio del 2014, probablemente poco después de que el juez del
Santa, Richard Concepción Carhuancho, decretara su prisión preventiva, por 18
meses, en el caso La Centralita, que se le sigue al ex presidente de la región
Áncash César Álvarez Aguilar.
Además,
según fuentes de la Sala Penal Nacional, lo más probable es que haya ingresado
a ese país de manera legal, antes de que se notificara la orden de captura a la
Policía. Es decir, la Policía peruana nunca habría tenido la posibilidad de
"meter un gol" con su captura, como decía el ministro del Interior,
Daniel Urresti.
La
temprana estadía de Belaunde Lossio en el país altiplánico se establece a
través de los e-mails trascendidos a la prensa y declaraciones de los
destinatarios de los correos, quienes han dicho que los mismos procedían de
Bolivia.
Como
reveló La República, lo extraño es que la Policía nunca requirió a la Fiscalía
información relevante que permitiera su captura.
Recién
el 29 de diciembre, dos días después del
informe de La República y el mismo día que Interpol Bolivia informaba a su
similar peruana de la presencia de Belaunde en ese país, dos oficiales de la
PNP se acercaron a la Fiscalía para interesarse por información que pudiera permitir la captura del mencionado
personaje.
EL
problema es que Belaunde, al solicitar el 15 de diciembre a Bolivia que lo
consideren refugiado, podría obtener un blindaje de ese país.
CAPTURA
INTERNACIONAL
Otro
hecho que las autoridades judiciales ponen de relieve para una temprana fuga de
Belaunde es que la orden de prisión preventiva dictada por el juez Richard
Concepción salió la madrugada del 29 de mayo,
por lo que él pudo viajar y pasar la frontera antes de que la decisión
judicial fuera oficiada a la Policía.
Igualmente
se debe tener en cuenta que recién el 5 de setiembre del 2014 el Juzgado Penal
Nacional dictó la orden de búsqueda y captura internacional para extradición.
Esa orden llegó a la sede de Interpol en Lyon, Francia, el 9 de setiembre y se
irradió a todas las oficinas el 11 de setiembre.
Es
decir, Belaunde pudo vivir en La Paz sin problema alguno, durante más de tres
meses, luego de que en el Perú se ordenara su detención. Lo que llama la
atención de los jueces y fiscales es que la Policía no detectara su salida del
Perú y su presencia en Bolivia durante tanto tiempo.
En
ese lapso Belaunde habría establecido una red de contactos entre políticos
bolivianos que avalarían y apoyarían su pedido de refugio. Además, habría
conseguido una serie de documentos que, a su criterio, respaldarían su posición
para declararse un perseguido político.
CORREOS
De
hecho, de junio hasta por lo menos agosto del 2014, Belaunde siguió dirigiendo
sus negocios a través del correo, como lo revelaron una serie de e-mails
difundidos en el programa 'Cuarto Poder' de América Televisión. El 18 de junio,
desde Bolivia, Belaunde logró que su empresa Corporación Asia SAC obtenga la
certificación ambiental para operar una mina de oro en Áncash.
Según
Cuarto Poder, el ex asesor de campaña del presidente Ollanta Humala utilizaba
su propia cuenta de correo y las de sus colaboradores, como Jorge Chang Soto,
para dirigir sus negocios.
“Eduardinho,
coordina con Chang hora y llegada y todo lo demás. Es importantísimo que hagas
bien las cosas. No va cualquier huevón, va un ingeniero de minas, un geólogo y
un par de huevones. Llévalos a Luiboff, en caso de oro, diles que hay que
caminar cuatro horas para llegar al punto, estate preparado porque de repente
te dicen ‘vamos’, enséñales las labores que ya empezamos, diles que solo
estamos trabajando artesanalmente porque justo cuando íbamos a empezar después
de hacer los estudios me tuve que esconder”, habría escrito Belaunde desde
Bolivia.
NO
PROTEGEN A DELINCUENTES
El
canciller boliviano, David Choquehuanca, afirmó que su país no protegerá a una
persona que huye tras cometer delitos comunes y menos por corrupción. Además,
subrayó que evaluarán toda la documentación que reciban sobre Belaunde Lossio,
ya sea de Interpol, del gobierno peruano o del mismo solicitante.
"En
este momento, él (Martín Belaunde Lossio) tiene la condición de solicitante de
refugio, y nosotros, como lo establece nuestra ley, tenemos un plazo máximo de
120 días para resolver esta solicitud, y está a cargo de la Conare (Comisión
Nacional del Refugiado)", afirmó Choquehuanca.
"En
este caso particular del señor Belaunde se tomará en cuenta toda la información
y documentación que nos llegue, esta puede ser presentada por el propio
solicitante, puede ser obtenida por la Conare o cualquier otra instancia. Vamos
a considerar toda la información que nos llegue, puede ser de la Interpol o del
propio gobierno peruano", precisó el canciller boliviano.
Este
lunes 5 de enero a partir de las 9:00 a.m., Belaunde está citado por la Conare
para una entrevista personal en la que tendrá que sustentar su pedido de
refugio.
Si
Belaunde no se presenta, el proceso puede ser declarado en abandono y sería
rechazado de plano. Lo más probable es que sí se presente.
En
su activa cuenta de Twitter, el prófugo empresario anunció que el 5 de enero se
empezaría a conocer su verdad.
SÍ
PROCEDE
Mientras
se tramita su pedido, Belaunde no puede ser detenido. Si le rechazan su
solicitud de refugio, dispondrá de 30 días para dejar Bolivia libremente.
Recién
después de ese plazo, es decir, en unos cinco meses, las autoridades bolivianas
accederían a detenerlo si permanece en su territorio.
En
Lima, José Urquizo, abogado del prófugo, afirmó que sí hay elementos para
considerar a su cliente un perseguido político. "Los hechos de los que se
le acusa a Belaunde han sido ensamblados para apuntar y decir que es el gran
cabecilla, incluso ya se le ha considerado responsable”, afirmó.
Por
su parte, el presidente de la Comisión Áncash, Mesías Guevara, indicó que
evalúan ir hasta Bolivia para interrogar a Martín Belaunde si su captura no se
hace efectiva pronto.
"Sería
una buena alternativa viajar. Su declaración es sumamente valiosa, tenemos que
hacerle muchas preguntas", aseveró.
En
tanto, la supuesta falta de la orden de detención internacional contra Belaunde
generó una controversia en las redes sociales entre el periodista Fernando
Rospigliosi y el ministro del Interior, Daniel Urresti.
El
ex ministro decía, basado en fuentes policiales, que la orden internacional no
existía; sin embargo, el actual ministro del Interior mostró un documento de
Interpol para afirmar lo contrario.
Presidentes
Humala y Evo Morales no hablaron del caso Belaunde
Libre
en La Paz, Martín Belaunde se mantiene activo en la red social Twitter con
mensajes en los que atribuye las imputaciones en su contra a un complot de los
medios, especialmente del grupo El Comercio, y responde a sus detractores.
En
uno de los mensajes dice: "¡Tan difícil es caminar con consecuencia! El
tiempo me dará la razón".
En
tanto, según un comunicado de la Cancillería, el presidente Ollanta Humala y su
homólogo de Bolivia, Evo Morales, no hablaron en ningún momento del caso del
empresario Martín Belaunde Lossio en la reunión de ambos mandatarios en Lima,
el 9 de diciembre, con motivo de la Vigésima Conferencia de las Partes (COP20).
Las fuentes subrayan que en ese momento no se sabía de la presencia de Belaunde
en La Paz.
"Desde
que se tomó conocimiento del actual paradero de Belaunde, los presidentes
Humala y Morales no han tenido contacto. El caso se está tratando mediante los
canales diplomáticos correspondientes, observando cuidadosamente las
obligaciones internacionales", señalaron.
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