Vayrón Jonathan Nakada Ludeña, el peruano acusado de matar a
seis personas en Japón, fue detenido por la Policía de ese país, tras ser dado
de alta por los médicos que lograron salvarlo.
El hermano menor de Pablo Nakada –llamado el 'apóstol de la
muerte', quien eliminó a 25 personas para “limpiar el mundo de la escoria”–
podría afrontar la pena de muerte (horca) si las autoridades demuestran que
asesinó a más de dos ciudadanos.
Despeinado, con el ojo izquierdo entrecerrado, con polo azul
y una casaca deportiva blanca, el peruano abandonó el hospital de Fukaya y fue
trasladado a la delegación policial de Kumagaya. Él tiene un abogado.
La Policía empezó a interrogar a Vayrón por la muerte de
Minoru Tasaki (55) y su esposa Misae (53), en su vivienda en Kumagaya,
Prefectura de Saitama, el pasado 14 de setiembre.
El peruano negó ser el autor de estas muertes. Sin embargo,
la prueba de ADN, realizada a las manchas de sangre halladas en la casa de las
víctimas, coinciden con las del sospechoso.
Nakada estuvo inconsciente desde el 16 de setiembre tras
caer desde una ventana del segundo piso de una casa. Recién el 24 recuperó el
conocimiento. Decidió colaborar con la investigación y ayer fue dado de alta y
trasladado a la comisaría de Kumagaya.
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