La convivencia de los internos de los establecimientos
penitenciarios de Cañete y Huaral, se hace sumamente difícil por la
sobrepoblación que existen, comprobable porque según cifras oficiales, ambos
penales excede en 200% de su capacidad.
Esta información ha sido dada a conocer por Wilfredo
Pedraza, exministro del Interior y actual asesor en temas de seguridad del
presidente, complementando que el país tiene 67 penales y una sobrepoblación de
127%.
Con esta justificación, el exministro del Interior señaló
que empezarán a construir penales privados en enero del próximo año, "no
hay un número de cuánto penales se pueden privatizar, en los 160 días el INPE
debe hacer cronograma y diagnóstico de sus necesidades, sobre esa base se
convocará a las empresas que tengan interés", apuntó.
Pero esto no significará una privatización total pues cada
centro penal seguirá siendo administrado por el INPE, quien decidirá qué
internos son recluidos, administrará el sistema disciplinario, la seguridad y
determinará las reglas de tratamiento.
El costo de la inversión que realizará el privado será
devuelto por el Estado en un periodo de 10 a 20 años, y además se les entregará
una reparación por cada interno que administren. Se espera que bajo esta
modalidad el INPE contará en un corto plazo con nueva infraestructura para
mejorar las condiciones carcelarias.
La participación del sector privado en la construcción de
los penales se basa en un proyecto que es parte de las facultades legislativas
otorgadas al Ejecutivo por el Congreso.
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